Año nuevo, vida nueva...Comenzó ya el mal tiempo, la lluvia, la primeras patatas ya brotan, sobre 250 simientes, alguna lechuga de invierno...
Por otro lado el pato, que se volvió agresivo y no había quien le plantase cara sin llevarse un gruñido y picotazo.
Se nos escapó allá por el 15 de diciembre, no volvió aparecer. Pasó el tiempo y las búsquedas fracasaban. Diez días después el día de Navidad, en una búsqueda sin muchas esperanzas, apareció. Cansado, manso y bastante lejos de la huerta lo cercamos para que no escapase, con ayuda de comida no hubo problema en cogerlo. El dia se convirtió en fiesta familiar por la vuelta del hijo pródigo, quien esperemos que no vuelva a fugarse de la huerta. Vuelve el pato a casa vuelve por Navidad.
Por otro lado el pato, que se volvió agresivo y no había quien le plantase cara sin llevarse un gruñido y picotazo.
Se nos escapó allá por el 15 de diciembre, no volvió aparecer. Pasó el tiempo y las búsquedas fracasaban. Diez días después el día de Navidad, en una búsqueda sin muchas esperanzas, apareció. Cansado, manso y bastante lejos de la huerta lo cercamos para que no escapase, con ayuda de comida no hubo problema en cogerlo. El dia se convirtió en fiesta familiar por la vuelta del hijo pródigo, quien esperemos que no vuelva a fugarse de la huerta. Vuelve el pato a casa vuelve por Navidad.